La vie qui a colonisé les mares est fort différente de celle que nous pouvons trouver dans les étangs et les lacs des Pyrénées étant donné que la salinité de l’eau impose des conditions spéciales.
La coloración verdosa del agua y del sedimento en los márgenes, cerca de la superficie, nos indica la colonización por algas microscópicas responsables de aprovechar la energía solar para la fotosíntesis.
Las hojas y otros materiales orgánicos que caen en el estanque son la fuente de materia orgánica de la que viven multitud de bacterias descomponedoras.
Los animales de mayor tamaño que viven en las aguas salinas de Gerri son unos crustáceos nadadores de pocos milímetros de largo y que se alimentan de algas unicelulares y bacterias.
La artemia (Artemia salina) de Gerri es, al parecer, una variedad curiosa ya que es partenogénica (no requiere la presencia del macho para reproducirse).
El fondo del estanque es negro porque está recubierto por fangos pestilentes. Cuando al agua le falta oxígeno, pero contiene materia orgánica, hay bacterias que usan el oxígeno del sulfato para consumir la materia orgánica, dejando en el agua o en el sedimento el sulfhídrico, que huele mal.